Luego de poco más de 100 años de evolución, la crítica cinematográfica mexicana ha sufrido una serie de transformaciones tanto estructurales como metodológicas. Desde que Fósforo y sus creadores Alfonso Reyes y Martín Luis Guzmán iniciaron esa aventura llamada crítica de cine, los medios en los que se plasmas y colectivizan las críticas, han cambiado diametralmente, hasta poder ampliar el número de lectores, radioescuchas y televidentes, que decidan escuchar a un analista-especialista de cine.
Actualmente en México -como en todos los países del mundo-, han proliferado críticos de todo tipo, desde el ocasional que asistió una película por el simple placer de ir al cine, hasta el especialista que ha tenido una formación académica en materia de Séptimo Arte, todos ellos apoyados en lo que anteriormente llamamos nuevas tecnologías, que no es otra cosa que la gran red mundial Internet.
Sin embargo, la inclusión gradual de la tecnología no debe ser motivo para que el nivel de la crítica cinematográfica mexicana pierda calidad, por ello, en el anterior recuento de críticos, críticas e historia de la crítica nacional, hemos puesto un énfasis especial en los buenos momentos periodísticos de cada uno de los protagonistas de esta historia, que indudablemente va de la mano con el desarrollo del cine mexicano, desde que Porfirio Díaz lo hizo llegar a territorio mexicano hasta nuestros días.
Vale la pena hacer conciencia de que el cine en general es susceptible de análisis y que en ese sentido, toda película puede verse de una manera diferente cuando atendemos las recomendaciones de nuestro crítico de cine de cabecera, con quien congeniamos por sus conceptos.
La habilidad del crítico como hemos visto en las anteriores páginas empieza en la buena observación, después en la paciencia de encontrar detalles visuales y argumentales y finalmente en procesar toda esa información para ofrecerle a sus lectores, escuchas o televidentes, una visión clara de lo que para él representa un filme determinado.
Así que, busquemos empatía en los críticos de cine mexicanos y no sólo veamos cine, que es una buena costumbre, también leamos y analicemos cine.