Se conoce como el "Efecto Tequila” a una crisis financiera de origen local causada por falta de reservas internacionales, devaluación de la moneda local y el fortalecimiento de una moneda extranjera. Dicho término nace a raíz de la crisis económica de México en 1994. También es conocida como el “Error de Diciembre”.
Esta crisis se presentó en el cambio de administración presidencial entre el ex presidente Carlos Salinas de Gortari y Ernesto Zedillo, durante los primeros días del sexenio la devaluación del peso mexicano alcanzó las cifras más bajas en la historia incrementando el valor del dólar casi un 300% y desencadenando altas tasas de inflación, falta de capital en los bancos, interés muy altos y crisis en la actividad comercial forzando a miles de empresas a realizar recortes de personal o incluso el cierre completo de estas mismas.
Para hacer frente a la emergencia se recurrió a un paquete de rescate que consistió en la inyección al Fondo Monetario Internacional de varios millones de dólares por parte de Estados Unidos y otros organismos internacionales para intentar estabilizar el precio del dólar y así tratar de contener la crisis y no afectar a otros países.
Con la globalización y los tratados de libre comercio los países con relaciones comerciales con México también sintieron el “efecto tequila”. Con el llamado “rescate financiero” la deuda externa de América Latina creció de 34 mil millones de dólares a 521 mil millones. Además de México; Venezuela, Brasil, Chile y Argentina fueron los más afectados de América Latina y el Caribe.
Argentina fue uno de los países que se vio severamente afectado por el “efecto tequila” llevándolo a tomar medidas de austeridad en su crecimiento económico e inversiones, los impuestos aumentaron notablemente, disminuyo la entrada de depósitos extranjeros, la liquidez en el banco Central de Argentina se redujo al mínimo y varios sectores fueron privatizados.
Argentina fue uno de los países que se vio severamente afectado por el “efecto tequila” llevándolo a tomar medidas de austeridad en su crecimiento económico e inversiones, los impuestos aumentaron notablemente, disminuyo la entrada de depósitos extranjeros, la liquidez en el banco Central de Argentina se redujo al mínimo y varios sectores fueron privatizados.